Hace tiempo que se predice que los periódicos se volverán irrelevantes o redundantes y que las empresas de medios pasarán por completo a las publicaciones digitales. The Independent en el Reino Unido ha optado por un enfoque exclusivamente digital. Tal vez The Guardian siga su ejemplo pronto. En Estados Unidos, muchas empresas de medios y sitios web de noticias han limitado su presencia al espacio digital. No tienen ninguna circulación de periódicos. Es evidente que el auge de la prensa numérica no tiene límites y podría conducir al fin de las noticias físicas.
- 2005 fue el último año satisfactorio para los periódicos. Generaron más de 60 mil millones de dólares en ingresos publicitarios solo en Estados Unidos. Si lo comparamos con 2014/15, los ingresos publicitarios han caído a menos de 20 mil millones de dólares. En el mismo período de diez años, el panorama laboral se ha reducido a un tercio de lo que era. No solo no ha habido crecimiento, sino que más de dos tercios de todos los empleados de estas organizaciones de medios impresos han trazado su camino a otro lado. Muchos se han visto obligados a irse.
- En 2014/15, los ingresos por publicidad de los medios digitales o sitios web de noticias en línea, incluidos los periódicos electrónicos, han sido sustancialmente superiores a los 20 mil millones de dólares. En pocas palabras, el espacio de los medios digitales ya ha usurpado a los periódicos o las noticias físicas como principal emisor o distribuidor de noticias e información que genera publicidad. Cabe señalar que los ingresos por publicidad del espacio digital tienen mucho más valor debido a la falta de impresión física, envío, circulación y todos los demás costos asociados que los medios digitales o la publicación en línea no tienen que afrontar.
El desarrollo de la prensa numérica y el fin de las noticias físicas no es una historia muy agradable. La realidad es mucho más preocupante de lo que la mayoría de la gente estaría dispuesta a aceptar o reconocer.
El mayor desafío de la circulación exclusivamente digital es el plagio, la falta de información y de fuentes que inevitablemente implican una menor rendición de cuentas y que pueden dar paso fácilmente a la difusión de información difamatoria, tergiversada y motivada como si fuera una noticia. Ya hay organizaciones que se limitan a reescribir las noticias que publican los grandes medios de comunicación. Estas organizaciones gestionan o apoyan sitios web de noticias o de medios de comunicación, pero son esencialmente escritores y editores con poca o ninguna experiencia en el periodismo y sin ningún acceso a la fuente o la raíz de las noticias que se publican en Internet. Estas reescrituras no sólo son una amenaza a la ética y los estándares periodísticos, sino también al tipo de noticias a las que estaríamos expuestos.
¿Queremos noticias creíbles de fuentes verificadas, examinadas por un editor y contrastadas con las partes interesadas para comprobar su autenticidad? ¿O queremos simplemente una representación flagrante o información errónea con el fin de conseguir más visitas a un sitio web?
La elección es sencilla: tenemos que elegir la fiabilidad por encima de la duda en cualquier momento. Eso puede no ocurrir con las organizaciones de noticias exclusivamente digitales, especialmente si no tienen periodistas sobre el terreno y si no son los canales directos con las fuentes. Por ahora, el destino de las noticias fiables está en juego y amenazado.
